EL
EXTERIOR DE LA IGLESIA DE
LA
MAGDALENA.
FACHADA
DE LA IGLESIA DE LA MAGDALENA.
Desde
la calle San Pablo, contemplo el exterior del que fuera Real Convento dominico
y actual Iglesia de la Magdalena.
Lo primero que observamos sobresaliendo sobre edificios y
tejados, es la monumental cúpula de azulejos adornada con figuras de indígenas
que recuerdan la importancia que tuvo esta Orden en la evangelización del Nuevo
Mundo, la linterna se culmina con una corona real.
La fachada a la calle San Pablo consta de tres
portadas, la del centro se utiliza para acceder al templo, y está formada por
un arco de medio punto, arriba un frontón con el escudo de la orden dominica
rematado con las esculturas en piedra de San Fernando en el centro y San
Isidoro y San Leandro a los lados.
¿Cuántos Viernes de Madrugada? me he situado en
esta puerta, para en un impresionante silencio ver salir a la Hermandad de
Calvario, al tiempo que llegan desde la lejanía los sones que anuncian a la Cofradía
de la Esperanza de Triana.
A la izquierda, metálica y con los escudos de la Hermandad la puerta de la Quinta
Angustia.
La tercera portada muy artística e interesante, cubierta
con un rico tejaroz está dedicada al fundador de la Orden dominica y sus simbolismos,
que vamos a ver con algo de detalles.
PORTADA
DEDICADA A SANTO DOMINGO DE GUZMAN.
En la hornacina sobre el frontón partido, se
halla la imagen de Santo Domingo de Guzmán, portando en su mano derecha una
cruz de dos brazos, evidencia de ser el fundador de una de las grandes órdenes
religiosas. En la mano izquierda lleva unas azucenas en señal de pureza y
castidad.
A sus
pies, sobre el frontón, unos perros sujetando con la boca unas antorchas, en referencia
al sueño que tuvo su madre estando embarazada del futuro santo. Cuenta la
leyenda, que su madre la Beata Juana de Aza, soñó que de su vientre salía un cachorro
con una antorcha encendida que prendía fuego a toda la tierra. Esto se tomó como que nacería un gran
predicador, que encendería y combatiría con la antorcha de su encendida palabra
toda clase de herejías.
Además
de lo narrado, en esta fachada podemos admirar un hermoso retablo cerámico del
Cristo del Calvario, y varias placas de mármol que recuerdan: una la fundación
del convento por Fernando III en 1248 cuando la conquista de Sevilla, otra la
consagración del dominico defensor de los indios Bartolomé de las Casas como
Obispo de Chiapas, Méjico.
Damos
la vuelta al edificio y nos situamos a los pies del templo cuya fachada está coronada
con una bella doble espadaña, la portada está dedicada al dominico Santo Tomás
de Aquino, y sobre ella un gran rosetón rodeado de bolas de cerámica azul que simbolizan
los misterios del Rosario.
Recordemos
la vinculación de esta Orden con el rezo del Rosario, basada en la aparición de
la Virgen a Santo Domingo entregándole el Rosario[i],
para que propagara su rezo por todo el mundo.
Terminamos
contemplando los dos relojes de sol y el retablo de cerámica dedicado a la
Virgen del Amparo.
[i] EL ÓLEO LA
VIRGEN ENTREGANDO EL ROSARIO A SANTO DOMINGO DE GUZMAN PINTADO POR MURILLO PROPIEDAD DEL ARZOBISPADO
SE PUEDE VER EN LA EXPOSICIÓN MURILLO Y LA CATEFRAL.
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