MONUMENTO
A LA
INMACULADA
CONCEPCION.
En
esta otra parte de la Plaza del Triunfo[i]
se encuentra el grandioso monumento levantado en 1918 por suscripción popular a
la Inmaculada Concepción.
Ante este hermoso monumento, blanco del color de la pureza,
estamos ante la presencia del sentimiento mariano e inmaculado que forma parte de
nuestro sentir cultural y religioso.
Aquí en Sevilla, la tierra de María Santísima, la festividad
de la Inmaculada el 8 de Diciembre es muy celebrada con dos eventos a cual más
multitudinario.
El religioso, la Octava de la Inmaculada Concepción, se
celebra en la Catedral los días del 8 al 15,
los niños llamados seises con sus trajes blancos y celestes, bailan ante
el Santísimo en una tradición muy hermosa que se remonta al siglo XVI[ii].
En el otro más
mundano pero no menos emotivo, en la madrugada del 8 de Diciembre a los pies
del monumento, se conmemora la festividad de la Purísima con las tunas
universitarias ofreciéndole sus coplas y pasacalles.
Recordemos un poco de
historia.
EL dogma de la Inmaculada Concepción, o sea que la Virgen
María desde el mismo momento de su creación estuvo libre del pecado original,
fue proclamado por el Papa Pio IX el 8 de Diciembre de 1854.
Pero mucho antes, durante siglos hubo una gran controversia
entre defensores y detractores.
Nuestra ciudad ha sido y fue pionera en la defensa de este
Dogma, para hacernos una idea de cómo estuvimos involucrados, nos tenemos que
remontar al siglo XVII donde surgió el
imparable movimiento popular inmaculista sevillano.
El detonante en 1613, fue un sermón pronunciado en el
desaparecido convento de Regina por el dominico Padre Molina, en el que se
expresaba con frases contrarias a las tesis inmaculistas, sus palabras indignaron
tanto al pueblo sevillano que se lanzó a las calles cantando coplillas como
estas:
Aunque
se empeñe Molina
Y
los frailes de Regina
con
su padre provincial,
María
fue concebida
sin
pecado original.
Todo
el mundo en general,
a
voces, Reina escogida,
digan
que sois concebida
sin
pecado original.
Años más tarde partió una delegación a Roma para proponer
al Santo Padre la declaración del Dogma inmaculista, no pudo ser aún tardaría
años en proclamase, si dictó una bula que prohibía en público la defensa de las
tesis maculistas, esto causó tanta alegría que fue muy celebrado en la ciudad.
A lo largo de todo el siglo, siguieron festejos,
procesiones, votos en defensa de la Inmaculada Concepción, como el de sangre
realizado por la Hermandad del Silencio, las iglesias se poblaron con tallas y
pinturas de la Inmaculada realizadas por los más famosos escultores y pintores
de la época. Podemos decir sin lugar a dudas, que este fue el siglo
concepcionista sevillano.
Para finalizar voy dar una vuelta alrededor del monumento,
fijándome en las cuatro figuras de personajes del siglo XVII que adornan su
pedestal.
-Murillo pintor de la
Inmaculada, cuya obra para el Hospital de los Venerables, expoliada por los
franceses y que se encuentra en el Museo del Prado, sirvió de modelo para la imagen
que culmina este monumento.
-Martínez Montañés escultor-imaginero
considerado el dios de la manera, de él recordamos la imagen de la Inmaculada
conocida como “la Cieguecita” que se puede contemplar en la Catedral.
-Miguel Cid escritor y
poeta[iii], autor de las coplillas que insertamos en
párrafos más arriba.
-Padre Juan de Pineda, teólogo
jesuita gran defensor del Misterio de la Inmaculada.
Dejo atrás este monumento y me encamino hacia el Patio de
Banderas.
[i]
EN EL ANTERIOR ESCRITO PUBLICADO
EN ESTE BLOG SE TRATA DEL MONUMENTO AL TRIUNFO.
[ii] SOBRE
LOS SEISES Y LA OCTAVA DE LA INMACULAA MUY INTERESANTE EL LIBRO DE HERMINIO GONZALEZ BARRIONUEVO LOS SEISES DE
SEVILLA EDITORIAL CASTILLEJO SEVILLA
1992.
[iii]
MIGUEL CID TIENE DEDICAA UNA CALLE EN EL BARRIO DE SAN VICENTE. VÉASE EN
ESTE BLOG LO PUBLICADO EL 27 DE JULIO DE 2014.