EL
ARCHIVO DE INDIAS
Y
MURILLO.
Volviendo “tras los pasos de Murillo”, me encuentro en el
Archivo General de Indias, creado en 1785 por el Rey Carlos III, donde se guardan
a disposición de investigadores y estudiosos, el mayor deposito de
documentación histórica sobre la Conquista, Colonización y Administración
española en el Nuevo Mundo.
CAÑON
ATOCHA Y DIBUJOS MURILLO.
Aquí en unos de sus salones, cuando era Lonja de
Mercaderes, fundan en 1660 Bartolomé Esteban Murillo y Herrera el joven la
Academia del Arte de la Pintura, precursora de la actual Real Academia de
Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría de Sevilla.
Para la conmemoración del Año Murillo,
se expone en el Salón presidido por el cañón Atocha, una serie de
reproducciones de dibujos de Murillo y de otros pintores de la Academia, como
este dibujo de San Isidoro de Sevilla, cuyo original al óleo contemplamos en la
Sacristía Mayor de la Catedral.
SAN
ISIDORO. MURILLO.
Este edificio, que forma parte desde 1987 con los Reales
Alcázares y la Catedral del conjunto de Monumentos sevillanos Patrimonio de la
Humanidad, tiene la interesante historia que no se construyó para Archivo, sino
para Lonja de Mercaderes.
En el siglo XVI Sevilla es una ciudad prospera, puerta del
Nuevo Mundo donde entraban y salían todo
tipo de mercancías, los mercaderes realizan sus transacciones de compra-venta
en las gradas de la Catedral y en el Patio de los Naranjos, con el grave
perjuicio que causaban a los cultos religiosos.
El Cabildo Catedralicio eleva sus quejas al rey Don Felipe
II, este considerando las razones de los religiosos, aprueba la creación de un
edificio para las actividades comerciales.
De estilo renacentista se levanta sobre unas gradas rodeadas
por cadenas entre columnas de mármol.
En el interior destacan la monumental escalera, el
esplendido patio y las galerías abovedadas donde en esplendidas vitrinas se
guardan documentos y legajos.
JARDINES
ARCHIVO DE INDIAS.
Salimos al exterior y damos un paseo
por los bonitos jardines situados delante de la fachada principal, continuamos hasta
el lateral que da a la Catedral, donde se encuentra la Cruz del Juramento, aquí
según la tradición, los comerciantes acordaban de palabra y con un apretón de
manos, sus transacciones comerciales.
CRUZ
DEL JURAMENTO.
Frente a esta Cruz, en el atrio de la
Puerta del Príncipe de la Catedral, se encuentra una esplendida copia en bronce
del Giraldillo, magnifica veleta que voy a contemplar a continuación.
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